Es una técnica en la que por medio de unas herramientas muy parecidas a unos ganchos se intenta dar movilidad, rompiendo adherencias y fibrosis entre los músculos, tendones, ligamentos y las envolturas que los envuelven.
Tenemos que tener en cuenta que el cuerpo humano se compone de diferentes tipos de tejidos: músculos, nervios, tendones, huesos. Todos ellos se interrelacionan por unas envolturas de tejido fibroso llamado tejido conjuntivo. Este tipo de tejido se denomina precisamente “conjuntivo” porque da forma y conecta al “conjunto” entre sí.
Sin embargo, además de aportarnos esta función, este tipo de tejido permite el deslizamiento sin fricción entre los diferentes componentes de nuestro aparato músculo-esquelético, facilitando así el movimiento entre fascículos musculares, tendones, ligamentos, huesos, nervios…
Como sabemos, existen cientos de músculos en nuestro cuerpo, cada uno de ellos es capaz de contraerse y trabajar de forma independiente. Es precisamente un tipo de tejido conjuntivo llamado tejido miofascial el encargado de rodear al músculo, separarlo e independizado de los de su alrededor, de esta manera puede trabajar de manera más eficaz, contrayéndose según los requerimiento, de manera independiente o asociada a otros músculos para realizar movimientos más potentes.
Sin embargo en muchas ocasiones, y como consecuencia de múltiples causas, este tipo de tejido puede endurecerse, adherirse y provocar lo que llamamos los fisioterapeutas las fibrosis.
Mediante esta técnica y valiéndonos de un buen conocimiento anatómico y patológico los fisioterapeutas somos capaces de identificar, diagnosticar y tratar las zonas de adherencias que encontramos entre estas estructuras. Estas herramientas con forma de gancho nos permiten penetrar de una manera más precisa y eficaz entre los fascículos musculares, incidiendo sobre lugares de difícil donde nuestras manos no pueden alcanzar.
Por lo tanto mediante esta técnica movilizamos selectivamente los diferentes grupos musculares o realizamos “rascados” en zonas de inserción de ligamentos y tendones. De esta manera se convierte en una un magnífico complemento para tratar múltiples patologías y lesiones como contracturas musculares fibrosis tendinosas, tendinopatías de inserción o problemas ligamentosos.